Regulaciones y normativas para la protección de hábitats que afectan al transporte marítimo.
La protección de hábitats marinos es esencial para la supervivencia de diversas especies y para mantener el equilibrio ecológico en los mares y océanos.
Existen diversas regulaciones y normativas que afectan a los transportistas marítimos en cuanto a la protección de hábitats marinos se refiere, tanto a nivel español, europeo como internacional.
No podemos perderlas de vista al organizar nuestras operaciones. Esto implica comprender las áreas protegidas, evaluar los impactos ambientales y aplicar prácticas sostenibles. Al hacerlo, no solo cumplimos con las regulaciones, sino que también contribuimos a la conservación de los ecosistemas marinos para las generaciones
En este artículo, te ofrecemos una vista de las principales regulaciones y cómo influyen en nuestra industria.
Directiva Hábitats.
Aprobada el 21 de mayo de 1992, la Directiva Hábitats es una normativa europea que tiene como objetivo proteger la biodiversidad en Europa. En España, la Directiva se ha incorporado al ordenamiento jurídico nacional a través de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad.
Identifica más de 200 tipos de hábitat y más de 900 especies como de interés comunitario y establece la necesidad de conservarlos, para lo cual obliga a que se adopten medidas para mantenerlos o restaurarlos en un estado favorable.
También crea una red ecológica coherente de zonas especiales de conservación con el nombre de Natura 2000, que también incluye las zonas de protección especial designadas de acuerdo con la Directiva Aves.
Convención sobre la Diversidad Biológica (CDB).
Convenio de Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica es un tratado internacional casi universal, adoptado en 1992, tiene como objetivo conservar la biodiversidad y promover la utilización sostenible de los recursos naturales y la distribución justa y equitativa de los beneficios derivados de su utilización. En el contexto marítimo, esto implica la protección de los hábitats marinos y la biodiversidad que sustentan.
Para nuestra actividad debemos estar al tanto de las áreas protegidas designadas y las restricciones asociadas para garantizar el cumplimiento de la CDB.
Convenio MARPOL.
El Convenio Internacional para prevenir la contaminación por los buques, también conocido como Convenio MARPOL, es un tratado internacional que establece normas para prevenir la contaminación del medio marino por parte de los buques. Fue desarrollado en 1973 por la Organización Marítima Internacional, organismo especializado de la ONU.
En este sentido, el Convenio MARPOL establece medidas para reducir la contaminación en los hábitats marinos y proteger la biodiversidad. Esto incluye la gestión adecuada de los desechos y el control de la contaminación del agua.
Debemos asegurarnos de que nuestros buques cumplan con los estándares establecidos y apliquen las medidas necesarias.
Convención para la Protección del Medio Marino del Atlántico Nordeste (OSPAR).
El convenio sobre la protección del medio marino del Atlántico Nordeste, o convenio OSPAR, auacrito en 1992 y en vigor desde 1998, fue el resultado de refundir dos convenios anteriores: el convenio de Oslo para la prevención de la contaminación marina provocada por vertidos desde buques y aeronaves, y el convenio de París para la prevención de la contaminación marina de origen terrestre.
Esta convención, que se aplica en el área marina del Atlántico Nordeste, tiene como objetivo proteger y conservar el medio marino contra la contaminación y el deterioro. Las regulaciones de OSPAR pueden afectar la logística del transporte marítimo al restringir el acceso o la actividad en áreas sensibles, como los sitios de cría de especies marinas en peligro de extinción.
Convenio de Barcelona.
El Convenio de Barcelona para la protección del mar Mediterráneo contra la contaminación es un tratado internacional que tiene como objetivo proteger el medio ambiente marino en el Mediterráneo.
En España, este convenio se ha incorporado al ordenamiento jurídico nacional a través de la Ley 41/2010, de 29 de diciembre, de protección del medio marino. Esta normativa establece medidas para prevenir y controlar la contaminación del mar Mediterráneo y proteger los hábitats marinos.
Directiva Marco sobre la Estrategia Marina (DMEM).
La DMEM, del año 2008, establece un marco para la protección y gestión sostenible de los ecosistemas marinos en las aguas de la Unión Europea. Establece que los Estados miembros deben adoptar las medidas necesarias para lograr o mantener un buen estado medioambiental del medio marino a más tardar en el año 2020. Para esto cada Estado miembro debe elaborar una estrategia marina para cada región o subregión marina.
Esto implica la identificación y protección de hábitats marinos, así como la evaluación de los impactos ambientales del transporte marítimo.
Como respuesta a esta directiva surge la Estrategia Marina Española, un plan de gestión integral del medio marino en España que tiene como objetivo proteger y conservar los ecosistemas y los hábitats marinos, a través de planificación, conservación, protección y mejora.
Áreas Marinas Protegidas (AMP)
Las Áreas Marinas Protegidas son zonas del mar que se han establecido con el objetivo de proteger y conservar la biodiversidad marina y los hábitats marinos.
En este sentido, las AMP establecen medidas para reducir los impactos negativos de la actividad humana en los hábitats marinos y proteger las especies que dependen de ellos.
En España, existen varias AMP que afectan a la actividad de los transportistas marítimos, como el Parque Nacional Marítimo Terrestre del Archipiélago de Cabrera o la Reserva Marina de Interés Pesquero de la Costa del Sol.
Si tienes dudas sobre qué regulaciones afectan a tu operativa y cómo adaptarla para asegurar la protección del mar, solicita una sesión gratuita de consultoría con uno de nuestros expertos y despeja tus inquietudes.
